¿Pensando en emprender un negocio? En ese caso, tendrás que decidir qué te conviene más: ¿ser autónomo o SLU? En otras palabras, reflexionar si darte de alta como trabajador por cuenta propia o si establecer una Sociedad Limitada Unipersonal? Nuestra asesoría para emprendedores y startups te da la respuesta en este post.
¿Qué es una SLU?
Que significa SLU se refiere a Sociedad de Responsabilidad Limitada Unipersonal. Es una sociedad limitada de un único socio. Por tanto, la totalidad del capital social corresponde a un solo individuo ( tanto físico como jurídico). Posee la misma base jurídica que la Sociedad Limitada, aunque sólo tiene un empleado en la plantilla. Dentro de las SLU, discernimos dos tipos:
- Originaria: desde el comienzo la sociedad se forma por un único socio, quien toma el control de todas las acciones.
- Sobrevenida: al principio, la sociedad estaba fundada por diferentes socios. Sin embargo, con el paso del tiempo, el número de éstos va disminuyendo hasta que uno adquiere todas las acciones.
Sea de la clase que sea, en todos los documentos, ha de constar el término de unipersonalidad.
Diferencias entre autónomo o SLU
Ahora qué ya conoces en qué consiste una SLU, toca exponer las diferencias entre ser Sociedad Limitada Unipersonal y darse de alta como autónomo. Estas son, en resumen, cuatro las diferencias principales entre una SLU o un autónomo:
Trámites de constitución
Entre las ventajas de ser autónomo, encontramos que convertirse en uno resulta mucho más fácil, rápido y económico. Sólo debes realizar dos trámites para ello: registrarte en los epígrafes del IAE y darse de alta en el RETA.
Constituir una SLU, por su parte, conlleva algún trámite más:
- Pedir el Certificado de Denominación Social en el Registro Mercantil.
- Crear los estatutos de la sociedad.
- Abrir una cuenta bancaria para la SLU y depositar un capital mayor de 3 mil euros.
- Conseguir el NIF (Número de Identificación Fiscal).
- Declarar el Impuesto sobre Operaciones Societarias.
- Formar parte del Registro Mercantil.
Desarrollar estos trámites trae consigo una serie de gastos, más o menos elevados en función de si te ocupas tú mismo de llevarlos a cabo o si contratas una asesoría contable.
Impuestos
Tendrás que presentar el modelo 130 de autónomos si eres uno. Es decir, tendrás que declarar el IRPF. ¿Leíste cómo saber qué IRPF te corresponde en nuestro blog? En ese caso, estarás al tanto de que el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas es progresivo y que la cantidad a pagar depende de tus ganancias.
Pero, con una SLU, se tributa a través del Impuesto de Sociedades, que posee tipos fijos. En otras palabras, no importa cómo vaya tu negocio o cuáles sean tus beneficios, el impuesto permanece constante.
Si deseas que las ganancias logradas sean parte del patrimonio de la sociedad, ¿te convendrá ser autónomo o SLU? Pues lo segundo, dado que el impuesto a pagar es inferior. Aunque, si prefieres quedarte con todos los beneficios al ser el único socio, deberás tener una nómina y, por ende, tributar el IRPF. Así que, en este caso, el pago de impuestos será el mismo que si trabajaras por cuenta propia.
Contabilidad
En caso de que seas autónomo, la contabilidad será un plus, pues las obligaciones que tendrás serán menos. Y es que sólo tendrás que presentar un informe contable donde se muestren los gastos, ingresos e inversiones.
Las SLU poseen muchas más obligaciones y más papeleos que tramitar. Deberás presentar balance de cuentas, libro de inventarios y cuentas anuales, el libro diario, libro de actas, libro de registro de socios, libro de acciones nominativas, libro de registro de la sociedad, etc. Y, si la fiscalidad de la sociedad estuviera sujeta al IVA, habría que entregar también sus libros fiscales.
Responsabilidad
La responsabilidad del trabajador por cuenta propia es ilimitada. ¿Esto qué significa? Que si, por alguna razón, hubiera deudas a las que enfrentarse, el empresario individual debería hacerlo incluso con su patrimonio personal.
La ventaja de ser SLU es que, en cambio, la responsabilidad estaría limitada al capital social de la misma. Esto podrá ser así siempre que la sociedad esté inscrita como unipersonal en el Registro Mercantil.
Acceso a financiación bancaria
Las SLU tienen, a priori, más facilidades para acceder a créditos bancarios, dado que las cuentas de éstas son más claras y precisas, proporcionando mayor confianza económica. Aunque, ya hablemos de autónomos o de sociedades limitadas, resulta fundamental un aval o una garantía.
Imagen comercial
Las SLU brindan una imagen más profesional, de compañía más grande y solvente. Así que, a nivel comercial, a menudo representan la opción más indicada.
¿Cuál es el mejor momento para cambiar de autónomo a Sociedad Limitada Unipersonal?
Al arrancar una actividad emprendedora, ser empresario individual o autónomo resulta más sencillo. Pues los trámites casi siempre son más simples y más económicos. Mientras el negocio despega puedes incluso beneficiarte de la tarifa plana de autónomos. Sin embargo, cuando tengas una actividad próspera o un negocio rentable, puedes plantearte qué forma jurídica te conviene más.
Sin embargo, existen una serie de casuísticas que suelen tenerse en cuenta en la mayoría de los casos para pasar a constituir una Sociedad Limitada de:
- Unos ingresos anuales que superen los 40.000€
- Proteger tu patrimonio personal frente a proveedores
- Que necesites financiación, es más fácil conseguirla si eres una sociedad
- Que vayas a trabajar con grandes empresas
- Un crecimiento en el número de empleados
Ventajas de Pasar de Autónomo a Sociedad Limitada
- Protección del patrimonio personal: Al constituir una Sociedad Limitada, los socios limitan su responsabilidad al capital aportado a la empresa. Esto evita que las deudas comerciales afecten directamente al patrimonio personal de los emprendedores.
- Mejora de la imagen y reputación: Al operar como una Sociedad Limitada, el negocio adquiere una estructura legal más sólida y reconocida en el ámbito empresarial. Esto genera mayor confianza y credibilidad tanto entre clientes como entre proveedores y socios comerciales. Una sociedad constituida transmite profesionalismo y solidez, lo que puede abrir puertas a oportunidades de negocios más importantes.
- Acceso a ventajas fiscales: El cambio de estructura de autónomo a Sociedad Limitada puede ofrecer ventajas fiscales, como la posibilidad de aplicar reducciones o bonificaciones en ciertos impuestos. Estas ventajas pueden contribuir a un mejor manejo de los recursos financieros y a una mayor rentabilidad para el negocio.
- Posibilidad de crecimiento y expansión: Al constituir una Sociedad Limitada, se establece una estructura empresarial más escalable y adaptable. Esto facilita el crecimiento del negocio y la posibilidad de realizar inversiones, contrataciones de personal y ampliación de operaciones, lo que puede llevar a una mayor rentabilidad y desarrollo a largo plazo.
- Mayor acceso a financiamiento: Al tener una estructura legal más sólida, las Sociedades Limitadas suelen tener un acceso más amplio y favorable a fuentes de financiamiento, como préstamos bancarios, líneas de crédito y la posibilidad de atraer inversores o socios comerciales.
Es importante tener en cuenta que cada situación es única y que el proceso de cambio de autónomo a Sociedad Limitada requiere cumplir con trámites y obligaciones legales específicas. Por ello, es recomendable buscar el asesoramiento de una asesoría fiscal y tributaria especializada para garantizar una transición exitosa y aprovechar al máximo las ventajas de esta nueva estructura empresarial.
Riesgos de ser autónomo o SLU
Ser autónomo o SLU conlleva una serie de riesgos, que es importante tener en cuenta antes de tomar una decisión. Estos riesgos incluyen:
- El riesgo de la pérdida de ingresos: como autónomo o SLU, eres responsable de tus propios ingresos. Si tu negocio no va bien, puede que no ganes dinero.
- El riesgo de la deuda: como autónomo o SLU, puedes endeudarte para financiar tu negocio. Si tu negocio no va bien, puede que no puedas pagar tus deudas.
- El riesgo de la responsabilidad personal: como autónomo, eres personalmente responsable de las deudas de tu negocio. Esto significa que si tu negocio no paga sus deudas, puedes perder tus bienes personales, como tu casa o tu coche.
Es importante tener en cuenta estos riesgos antes de decidir si ser autónomo o SLU es la mejor opción para ti.
A continuación, se presentan algunos consejos para mitigar los riesgos de ser autónomo o SLU:
- Haz un plan de negocios: antes de empezar tu negocio, es importante hacer un plan de negocios. Esto te ayudará a identificar los riesgos potenciales de tu negocio y a desarrollar estrategias para mitigarlos.
- Ahorra dinero: es importante ahorrar dinero para tener un colchón financiero en caso de que tu negocio no vaya bien.
- Ten un seguro: es importante tener un seguro para protegerte de los riesgos de tu negocio, como el seguro de responsabilidad civil, el seguro de desempleo y el seguro de enfermedad.
- Busca ayuda profesional: si no estás seguro de si ser autónomo o SLU es la mejor opción para ti, busca ayuda profesional de un asesor fiscal o financiero.
¿Qué es más barato ser autónomo o sociedad?
Ser autónomo o constituir una sociedad conlleva costos de gestión que varían según la estructura legal elegida. En general, los costos de gestión de los autónomos tienden a ser más bajos que los de las sociedades debido a la simplicidad en el manejo contable.
Por ejemplo, como autónomo puedes beneficiarte de la tarifa plana, donde la cuota mensual durante el primer año es de 60 euros y en el segundo año puedes disfrutar de bonificaciones del 30% y 50%.
Si optas por ser autónomo societario, también puedes acceder a la tarifa plana. En este caso, la cuota mensual durante el primer año puede ser cercana a los 85 euros, debido a la reducción del 80% sobre la cotización por contingencias comunes.
Es importante tener en cuenta que estos ejemplos son aproximados y pueden variar según la legislación vigente y las circunstancias individuales. Además, existen otros factores a considerar, como los impuestos, las obligaciones fiscales y los costos de constituir y mantener una sociedad.
Antes de tomar una decisión, es recomendable buscar el asesoramiento de una asesoría fiscal y tributaria especializada, que pueda evaluar tu situación particular y brindarte una visión más precisa de los costos de gestión asociados tanto a ser autónomo como a constituir una sociedad.
Conclusión
En conclusión, al analizar las ventajas y desventajas de ser autónomo o constituir Sociedad Limitada Unipersonal o asociarte con otras personas en una Sociedad Limitada (SL), es importante considerar cuál opción se adapta mejor a tus necesidades y objetivos empresariales. Ambas figuras presentan pros y contras, y contar con el apoyo de una asesoría para autónomos online especializada, puede ser de gran ayuda para tomar la decisión adecuada.
Con nuestras asesorías mercantiles te brindamos el apoyo necesario en este proceso. Además, ofrecemos servicios para cubrir todas tus necesidades empresariales. Valoraremos tu situación específica, evaluaremos los beneficios fiscales y legales disponibles, y te proporcionaremos la orientación necesaria para tomar una decisión informada y acertada.
Recuerda que cada situación es única, por lo que te invitamos a buscar nuestro servicio de asesoría personalizada y a aprovechar nuestros conocimientos y experiencia para impulsar tu negocio en la dirección correcta. ¡No dudes en contar con nosotros para guiarte en tu camino hacia el éxito empresarial!